Señora Menchu

Hoy estoy más tierna que el día de la madre, así que le dedicaré el post este, obviamente, a mi madre. Quién me conoce sabe que soy una chica como poco peculiar (eufemismo de raradecojones) y parte (la parte buena) de eso que me distingue del resto la he sacado a mi madre (la otra parte es cosecha propia xD).

Mi madre es una mujer a la que le ha tocado vivir una parte bastante jodida de la historia de España: final de la posguerra y la dictadura franquista, y para haber pasado esa época es una mujer bastante liberal. Como muestra está lo bien que ha aceptado que su hija sea de la cajcara amarga y que tenga una novia de edad pervertible (aunque en realidad sea distinta). No voy a empezar a decir que mi madre es la mejor del mundo (que lo es) o que la quiero mucho sino contar esas joyas que hacen que me resulte una mujer encantadora y que nunca va a dejar de sorprenderme:

Situación: Año 1998 ó 1999, en el salón de casa estamos Ninde, Menchu y yo. Mientras Ninde y yo charlábamos mi madre estaba viendo la tele. En ese momento ponen un anuncio de “dos hombres y un destino”:

-Menchu: “Ainss, hija no lo entiendo”

-Leda : “El qué mama?”

-M: “Me parece muy bien que seas homosexual y tal, pero no lo entiendo”

-L : O__o ¿Qué no entiendes?

-M: “Cómo no te puede gustar Paul Newman, con lo guapo y lo bueno que estaba en sus años mozos”

Ninde asiente con la cabeza y le da la razón a mi madre

-M: “A qué es verdad?”

-L: “Ya mama, pero a los tíos heteros tampoco les gusta”

-M: “Pues tienes razón hija mía, aunque en fin, a los hombres sí que no los entiendo”

Situación: Hará un par de años, en el salón de la (nueva) casa

-Menchu: “Cómo me encantaría tener un nieto”

-Leda: “Pues cuando quieras te lo doy mamá”

-M: O__o

-L: “Sí, pero me tienes que dar las pelas para poder tener a un papa congelado”

-M: “Uy y cuánto cuesta?”

-L:” Más de medio kilo como poco, creo”

-M:”uy quita, quita, si eso le pones una bolsa en la cabeza a un hombre y ya está, que sale más barato, total por una vez”

Situación: Sobre el año 2000 (more or less). Mi madre me pregunta si tengo algún boli a mano y le digo que busque en el cajón de mi cuarto. Allí descubre mi madre un condón que tenía por allí perdido.

-Menchu: “Hija, y esto?”

-Leda (intentando vacilar): “Por si me da por probar con un tío, para que no me pille sin nada”

-Menchu: “Uy si? Me parece bien hija pero –mientras le da la vuelta al condón- yo que tu me achuchaba un poco porque te caduca en ná”

Otro ejemplo sería el del Deneb y podría tirarme un buen rato contando más cosas. Ni que decir tiene que todos lo comentarios anteriores los hacía (y hace) siempre de coña, pillándome en unos renuncios de la leche.

Si os preguntáis el por qué de este momento de ternura materna es simple. Ahora, como todo el mundo estudiantil, está en plena época de exámenes. Eso hace que esté aún más borde, irritable, rancia , etc y las dos personas que más me aguantan en estos momentos son mi novia (pobrecita mía lo que le ha caído xD) y mi madre, y la buena mujer no sólo me está aguantando como una campeona, sino que me mima mucho más de lo que me merezco y hace que estos días sean mucho más soportables…ains, si es que no me la merezco.