Un día perfecto

Si pensais que os voy a decir que he tenido un día perfecto y maravilloso, jodío lo llevais. Me he pasado cerca de 10 horas en la facultad, no he comido, he tenido un examen de 3 horas y media con el que tendré pesadillas esta noche, y un tio que estaba delante de mí en el metro se ha tirado un pedo en la cara (si alguien me dice ahora que porque no le mande a tomar por culo pensad en una cosa: tio de metro noveta y... chica de metro sesenta). Así que aturdida por los gases orgánicos empece a imaginarme cual sería mi día perfecto y como soy generosa, quiero compartirlo con todos vosotros:

El día perfecto de Leda:

Me levanto, miro que hora es e independientemente de lo que marque el reloj pienso "uy, qué pronto es aún" y sigo durmiendo. Unas tres horas más tarde me vuelvo a despertar por el hambre y como todavía no es la hora de comer pero ya es demasiado tarde para desayunar voy a la cocina a por comida rica (tipo bollos y dulces en general). Me vuelvo a la cama a dormir. Dos horas después me levanto y Oh! sorpresa, tengo la comida en la mesa (una cosa que me guste, claro). Y después de comer qué es lo más normal que se hace? exactamente, me echo la siesta. Después de cuatros horas de siesta, me levanto para cenar (ni que decir tiene que la cena ya estaría preparada) me pongo a ver una película, obviamente, desde la cama, para que cuando me entre la modorra solo tener que apagar la tele/ordenador/cualquiercosaconimagenesenmovimiento para seguir sobando.

Y esta noche me toca quedarme a chapar, solo de pensarlo, duele