No soy fan de los chupetones y otras marcas, y menos aún en zonas en las que sean visibles.
Aunque, y siendo muy sincera, en el momento en el que me lo hizo estaba tan preocupada de eso como de quien ganará la liga en el 2015.
El problema es después, cuando todavia con una sonrisilla (o sonrisa de oreja a oreja, dependiendo de como haya sido), te mira y te dice con carita de cachorrillo "uy, lo siento" mientras te señala el cuello. Te miras al espejo y ves que tienes una mancha morada intensa, que contrasta increiblemente con el blanco lechoso de la piel.
Eso lo hemos pasado todo el mundo alguna vez en nuestra vida, en el cuello, en los hombros o inlcuso en las lolas. Sales un sabado por la noche de fiesta y el domingo por la mañana te das cuenta de que tienes un recuerdo (a veces puede ser de la única cosa que te acuerdas de la noche).
Lo malo está en cuando no es ni sabado por la noche, ni estas de fiesta. Sino que es lunes, en casa de los padres de ella, os vais a la habitación a echaros una siesta (sin nada en el cuello) y un par de horas después bajáis (con regalo). Obviamente la policia no es tonta, pero una cosa es que sepan que cometes un crimen y otra que lo acabas de cometer.
Mi suegra, por supuesto, no tardo en darse cuenta. Mi madre, a pesar de llevar el pelo suelto y haberme echado maquillaje, me ha preguntado por ese cardenal del cuello. Respuesta: "El conejo de bhoita, que al agarrarlo me ha pegado una patada en el cuello". Convincente un 0%, sobretodo porque después cambio de tema radicalmente.
Nota para Manu: El proximo post, el proximo...
Keep Reading...
Aunque, y siendo muy sincera, en el momento en el que me lo hizo estaba tan preocupada de eso como de quien ganará la liga en el 2015.
El problema es después, cuando todavia con una sonrisilla (o sonrisa de oreja a oreja, dependiendo de como haya sido), te mira y te dice con carita de cachorrillo "uy, lo siento" mientras te señala el cuello. Te miras al espejo y ves que tienes una mancha morada intensa, que contrasta increiblemente con el blanco lechoso de la piel.
Eso lo hemos pasado todo el mundo alguna vez en nuestra vida, en el cuello, en los hombros o inlcuso en las lolas. Sales un sabado por la noche de fiesta y el domingo por la mañana te das cuenta de que tienes un recuerdo (a veces puede ser de la única cosa que te acuerdas de la noche).
Lo malo está en cuando no es ni sabado por la noche, ni estas de fiesta. Sino que es lunes, en casa de los padres de ella, os vais a la habitación a echaros una siesta (sin nada en el cuello) y un par de horas después bajáis (con regalo). Obviamente la policia no es tonta, pero una cosa es que sepan que cometes un crimen y otra que lo acabas de cometer.
Mi suegra, por supuesto, no tardo en darse cuenta. Mi madre, a pesar de llevar el pelo suelto y haberme echado maquillaje, me ha preguntado por ese cardenal del cuello. Respuesta: "El conejo de bhoita, que al agarrarlo me ha pegado una patada en el cuello". Convincente un 0%, sobretodo porque después cambio de tema radicalmente.
Nota para Manu: El proximo post, el proximo...